Ubicado entre los pintorescos pueblos de Petra, Vilafranca y Sant Joan, se encuentra el encantador Santuario y ermita de Bonany. Este lugar sagrado ofrece a los visitantes una experiencia única y vistas panorámicas impresionantes que realmente merecen ser descubiertas.
La ermita, aunque pequeña en tamaño, cautiva con su belleza arquitectónica y su altar, que muchos han comparado con el de la Catedral de Santiago. Al recorrer el pasillo hasta el santo, uno se siente inmerso en una atmósfera mística y llena de paz.
Sin embargo, lo más destacado de la visita son las vistas desde lo alto. Ubicada en una colina de aproximadamente 300 metros de altura, la ermita ofrece una perspectiva única del “pla de Mallorca” y una gran parte de la costa, que se extiende desde Manacor hasta Alcudia.
Es simplemente precioso presenciar este increíble panorama.
Si bien llegar al Santuario y ermita de Bonany es cómodo en coche, también se puede optar por una agradable caminata desde Petra. Para aquellos que disfrutan de la naturaleza, hay un sendero que atraviesa el bosque y lleva hasta la ermita.
Incluso aquellos que visitan con niños pueden disfrutar de esta caminata, ya que no presenta dificultades significativas.
Una vez en el santuario, encontrará áreas de descanso con mesas y sombras para disfrutar de un picnic o una siesta reparadora.
Además, el entorno natural que rodea la ermita invita a dar agradables paseos y explorar los alrededores.
Aunque la arquitectura del lugar no sea de especial interés, la ubicación del Santuario y ermita de Bonany es simplemente inmejorable. Es un mirador espectacular que te permite contemplar gran parte de la isla de Mallorca.
Muchos consideran a este lugar como un tesoro escondido, ya que atrae menos turistas en comparación con otras atracciones turísticas más populares.
Sin embargo, no subestimes su belleza y su valor histórico. Es el sitio perfecto para hacer fotografías y admirar las vistas, así como para disfrutar de la tranquilidad y la serenidad que ofrece.
En resumen, visitar el Santuario y ermita de Bonany es una experiencia enriquecedora para todos los amantes de la naturaleza, la tranquilidad y la historia. Desde sus vistas panorámicas hasta su entorno apacible, este lugar te cautivará y te brindará una perspectiva única de Mallorca.
No importa si decides llegar en coche o aventurarte en una caminata a través del bosque, la recompensa será indudablemente impresionante.
¡No pierdas la oportunidad de explorar este maravilloso rincón de Mallorca y sumergirte en su atmósfera especial llena de espiritualidad y belleza natural!